Las habitaciones eran un poco pequeñas, pero el servicio fue excepcional y la comida deliciosa.

cálido ambiente, desayuno excelente, habitaciones reducidas.

Recomendarlo a parejas que buscan un lugar especial

La atención de Ibrahim fue excepcional, nos hizo sentir como en casa desde el primer momento. Además, nunca olvidaré la sorpresa de un delicioso pastel por el cumpleaños de mi esposa, fue muy emotivo.

No fue barato, pero vale la pena.

El riad merzouga es un lugar impresionante. Ibrahim, el gerente, fue muy amable y nos entretuvo tocando la guitarra. La habitación era acogedora, con una cama espectacular de casi 2 metros. La limpieza del riad es impecable y los desayunos son fenomenales. Además, está a solo 15 minutos caminando de la kasba, rodeado de zocos encantadores que hacen que cada paseo sea una aventura.

recomendado

Impresionante hospitalidad y desayuno delicioso.

Impresionante lugar en Marrakech. La habitación era acogedora y contaba con una cama espectacular de casi 2 metros. Ibrahim, el gerente, fue muy amable, tocando la guitarra para nosotros, creando un ambiente inolvidable. El desayuno estaba delicioso y variado, una excelente manera de empezar el día. Además, la limpieza del riad es impecable y se encuentra a solo 15 minutos de la plaza central, lo que lo hace muy accesible.

El acceso con maletas puede ser un poco complicado.

La habitación tenía un olor a humedad, pero estaba decorada con encanto.

recomiendo este lugar insistentemente para una breve parada

Encantador lugar, acogedor ambiente, con un desayuno delicioso que a mi hija de 7 años le encantó y su ubicación cercana al centro permite explorar la ciudad fácilmente sin necesidad de taxis.

Todo estuvo perfecto

una experiencia inolvidable con la hospitalidad marroquí en este acogedor riad muy cercano al bullicio de la medina

La atención del personal es excepcional. Ibrahim, el anfitrión, nos hizo sentir como en casa desde el primer momento. El ambiente es auténtico y cálido.

El Riad Merzouga es una joya en Marrakech. El trato excepcional, especialmente con Ibrahil, hizo nuestra estancia inolvidable. La limpieza y la decoración son impresionantes, con un desayuno delicioso que alegró cada mañana. Eso sí, sería bueno tener más opciones de pago.

El lugar es realmente acogedor y se siente como en casa. La limpieza es impecable y el ambiente familiar se agradece, además de tener un desayuno delicioso con auténticos productos locales. Sin embargo, la conexión con taxis fue un poco complicada y las calles alrededor pueden ser ruidosas. A veces, el camino hacia el centro puede resultar un poco largo, aunque es fácil perderse en los encantadores zocos. En general, la experiencia ha sido muy positiva, aunque algunas cosas podrían mejorar.

El lugar tiene una decoración preciosa y el desayuno sorprendentemente bueno. Pero fue difícil localizar la entrada al principio, ya que está en un callejón. Ofrecen interesantes clases de cocina y tours culturales que valen la pena.

El lugar es increíble, decorado con un encanto único que te transporta a otra época. El personal es increíblemente amable, siempre sonriendo y listo para ayudar. El desayuno es más que suficiente, variado y delicioso. Además, la ubicación es ideal para explorar la zona.

Las calles alrededor pueden parecer un poco confusas al principio, pero una vez que las conoces, es totalmente seguro.

La habitación Deluxe Triple contaba con un espacio amplio y cómodo, ideal para grupos. El riad tiene una decoración auténtica que realmente te transporta a otro lugar.

El taxi agendado cobró 30€, un precio elevado comparado con la tarifa estándar de 15€. Solo había una ventana en la habitación, que daba a un mini patio ruidoso donde todos pasan. Además, el olor a humedad era bastante fuerte. Para colmo, los automóviles no llegan a la puerta, así que hay que caminar un poco con las maletas, y las excursiones son mejores comprarlas fuera del riad, donde son más económicas.